La complejidad del proceso de gestión del conocimiento
Ortega y Gasset (2004) ha planteado: «quisiéramos poder conocer; pero, no obstante, durante milenios y milenios el hombre ha trabajado para conocer y sólo ha logrado muy pequeños conocimientos. Este es nuestro privilegio y esta es nuestra dramática condición». Tradicionalmente los seres humanos hemos buscado producir cantidades inmensas de información, pero descuidando la producción de conocimiento, así como la conversión del conocimiento en saber. Esto se debe a la tendencia de los seres humanos a asimilar conocimiento y saber con información, generando conformidad porque la información no requiere de análisis crítico, transversalidad, contextualización y responsabilidad en sus implicaciones.
La información es la retroalimentación que se obtiene en torno a una realidad, que es procesada por la mente humana y que se comparte en espacios sociales. El conocimiento, en cambio, es un conjunto de representaciones entretejidas basadas en información, con análisis, síntesis, interpretación y argumentación, en un determinado contexto, con significación y consciencia de sus interrelaciones. El saber, por su parte, es tener un conjunto amplio de conocimientos, y aplicarlos en actividades y problemas teniendo en cuenta sus implicaciones desde el compromiso ético (Tobón, 2005).
De esta forma, la gestión de la información consiste en buscar y administrar datos de la realidad, mientras que la gestión del conocimiento se refiere a buscar y a administrar conocimiento con sentido crítico, contextualización en la sociedad y sentido de servicio a la comunidad. Además, desde la gestión del conocimiento se debe llegar al saber, es decir a la aplicación del conocimiento para buscar el bienestar personal y social. En este sentido, entonces, es necesario tener claridad cuándo se está haciendo referencia a la gestión de la información y cuando a la gestión del conocimiento, para evitar confusiones en un área en la cual es común encontrar que se hable de gestión de la información como sinónimo de gestión del conocimiento.
La gestión del conocimiento es un proceso complejo por las siguientes razones:
* El conocimiento está en continua evolución y cambio por el aumento continuo de la información, acorde con el desarrollo de las diversas disciplinas y ciencias, y la evolución de las tecnologías de la información y la comunicación. Al convertirse el conocimiento en el capital central de la sociedad, lo que tiende a primar en éste es la inestabilidad, más que la estabilidad, como sí ocurría en la sociedad industrial de mediados del siglo XX.
* El proceso de búsqueda, construcción, significación y aplicación del conocimiento requiere comprender, detectar y abordar la incertidumbre de forma estratégica, con flexibilidad. La incertidumbre se da por el surgimiento continuo de nuevas realidades y cambios en la cultura tradicional. Tradicio nalmente, la incertidumbre era más un temor que una realidad, y por ello en la gestión del conocimiento en las organizaciones se buscaba la certidumbre mediante estructuras rígidas, jerarquías, divisiones funcionales y autoridad centralizada (Zand, 2002).
* Se requiere del análisis inter y transdisciplinario para comprender todo conocimiento, y la forma cómo éste se imbrica en el contexto de las personas, de la sociedad y del entorno en general, tanto en el plano presente como en el plano prospectivo a largo plazo.
* Por último, la complejidad de la gestión del conocimiento se ve reflejada en el hecho de que buscar, construir, significar y aplicar el conocimiento en torno a una determinada realidad, es en sí encontrarnos a nosotros mismos, pues es a nosotros a quienes descubrimos y es con nosotros mismos con quienes contamos (Morin, 1995). Construir el conocimiento de cualquier realidad es a la vez dar cuenta de nuestras estructuras y procesos mentales y personales, por lo que el grado de significación y contextualización del conocimiento dependerá de cómo sea nuestra forma de pensar y de sentir la realidad, y esto hace más compleja la gestión del conocimiento, pues es más que trabajar con la información y sistematizarla, tal y como muchas veces se entiende.